En algunos países ya se registran más de 80 días en confinamiento, y muchos cambios se han generado en todo este tiempo. Una de las industrias más afectadas ha sido la aeronáutica, y hemos visto cómo las estructuras de la aviación han redefinido sus líneas de coordinación, para dar un giro acertado e implementar soluciones de recuperación a tiempo.
En este sentido, los Estados aseguran medidas preventivas para vuelos internos, pero para recibir pasajeros internacionales es importante ser aún más cautelosos, construyendo medidas de seguridad tanto en los aeropuertos de origen como en los de destino.
Bajo esta nueva realidad, se ven favorecidas las rutas y aerolíneas domésticas, ya que estas no se verían afectadas por el tiempo que se tome cada Estado para determinar las condiciones de seguridad de los aeropuertos de origen y destino de cada ruta internacional.
Según un estudio publicado por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) relacionado al impacto económico del Covid-19:
“las pérdidas estimadas en rutas domésticas son menores que en las rutas internacionales. Aún cuando la rentabilidad favorece a las rutas internacionales, el tiempo de recuperación es menor para las rutas internas”.
Esta proyección podría variar según sea la realidad de cada país y la proporción de operaciones de transporte aéreo internacional versus transporte aéreo doméstico. De esta forma, las aerolíneas se verán en la obligación de crear un esquema de operaciones de rutas aéreas domésticas rentables, que reactiven el flujo de caja en lo económico y en lo operacional.
Amplía esta información recolectada por Rolando Esser de Lima en TorreElDorado.co
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